¿Para qué callar y asentir? Estoy cansada de hacer lo que todos esperan que haga, solo abrir la boca para decir que sí me pone enferma. De verdad, estoy harta de no decir lo que pienso por miedo a que me rechacen, a que me traten diferente o incluso a que me dén de lado. Asiento a todo y a todos para que estén contentos y sigan contando conmigo para todo, pero lo que no comprenden es que de tanto en cuando necesito un respiro, una pausa para descansar por muy corta que sea. Así que, si alguien lee esto, que sepa que si alguna vez le digo que no, no debería enfadarse conmigo, debería estar orgulloso de lo que he aprendido; y que si alguna vez no lo ayudo es porque no me quedan fuerzas aunque en el fondo ansíe ayudarle.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada