chimes of freedom

Me gustaría anhelarte día a día y soñarte noche tras noche. Ojalá fueras la razón de mi existencia, me gustaría decir que te necesito para vivir, y lo siento, lo siento mucho, pero no es así. Hace tiempo que pienso, y pienso, y no dejo de pensar en ello, en esto, en nosotros; y he llegado a una conclusión. ¿Sabes? He llegado a pensar que podríamos haber sido felices. Pero ahora que lo pienso en frío, en un ambiente casi congelado, me doy cuenta de que nos hemos salido del sendero. Estamos perdidos, especialmente yo; y antes de encontrar la salida de tal laberinto debería encontrarme a mi misma. Así que lo siento, puedo pedirte un tiempo eterno, o tal vez un nunca jamás. ¡Que siquiera yo sé lo que quiero! Creía que lo peor que podía encontrarme en esta vida era el odio o la soledad, ahora sé que no, me he encontrado con lo peor: yacer perdida. No sé dónde estoy, qué estoy haciendo... tan siquiera sé quién soy. ¿Cómo pretendo estar bien con alguien, si no estoy bien ni conmigo misma? Que te lo he dicho y te lo repetiré las veces que haga falta, ¡LO SIENTO! Sé que te dije que intentaría no hacerte daño, no lo he conseguido, en esta vida no se consigue todo. Y te odio, te odio porque cada vez me siento peor al tener que hacer esto, pero eres tú o yo. Siento ser lo más egoísta que se te ha echado en  cara pero elijo mi felicidad, lo siento, no te quiero.