PAS SI SIMPLE

 Y un día te levantas y te das cuenta de que nunca has sido quien creías ser.

La superficialidad reina en este mundo, por eso nunca habías pensado en echarle una ojeada a tu interior; pero hoy te has levantado con ganas de descubrir mundo y llegas a la conclusión que no hay mejor mundo para descubrir que el tuyo.

 Ese mundo en el que solamente tú tienes contraseña para entrar, y eso te alivia porque puede que nadie pueda entrar a mejorarlo, ¿pero qué más da? tampoco podrán entrar a destrozarlo, y en el fondo eso es lo que cuenta. Además, eres libre y autosuficiente, no necesitas a nadie para ser feliz.

 ¿Sabes lo que necesitas para ser feliz? Enmendar todos tus errores. Sí, todas esas cagadas que de una manera u otra te impiden seguir avanzando por ese camino al que algunos lo llaman vida,aunque otros sean más partidarios de llamarla tortura, batalla constante o similitudes.

 Pero bueno, a lo que iba, a enmendar errores. No, no basta en esconderlos debajo de la alfombra de la sala de estar. Debes afrontarte a ellos, volver atrás y plantar cara; pedir perdón si es necesario y arrepentirte. Aprender la lección, aceptar la moraleja y no volver a tropezar una vez más con la misma piedra.